Desierto o De Cierto
A veces no sabemos si hay algo de cierto o desierto en las razones. Lo que busco es liberarme de una duda que nunca me será aclarada, pero yo prefiero optar por el engaño y no dejarme abrazar por la desesperación que a veces me seduce más de la cuenta. Lo que busco es hacerme una idea de múltiples razones, o excusas, que se puedan tener, que se puedan buscar o peor aún, se puedan encontrar, para soltarlo ¨todo¨.
Quién se engaña al final? Me engañas tú, me engaño yo, te engañas tu o simplemente nos estamos engañando los dos. Que hay de cierto en tus razones? Que hay desierto en las mías? Si a veces fracasamos en algún llamado, caemos en un fango de intento y siguen así las dudas sin aclararse. No es oportuno el momento en que nos vamos, pero peor todavía: la hora que deciden los adiós sentarse en el centro de nuestras ánimas o simplemente venir a recordarme de una forma muy personal que él (el adiós) existe y me sonríe de forma inadvertida y robándome el sueño sin dejarme dormir.
Yo opto por creerme a mí mismo y no buscar más, sólo para no molestar y seguir adelante… y pensar que pudo ser o cómo pudo haber sido, o simplemente cómo nunca hubiese sido.